Si tienes un amigo que es un poco (o un mucho) pacheco, te habrás dado cuenta que muchas veces se siente un tanto incomprendido debido a que su gusto por la mota lo ha llevado a ser encasillado en muchos estereotipos.
Ellos quieren que comprendamos que no son como nos los pintan, que en realidad se trata de personas comunes y corrientes, como tú y como yo, que solamente tienen un gusto particular por fumarse un porro cuando se les antoja.
Estas son las cosas que los marihuanos quieren que todo el mundo entienda:
NO SON UN DESMADRE
Las personas que llevan una vida desmadrosa, lo serán independientemente de que sean pachecos o no lo sean. Muchos marihuanos son totalmente tranquilos y llevan vidas normales.
PUEDEN ESTABLECER UNA CONVERSACIÓN COHERENTE
Contrario a lo que se piensa, no divagan o dicen puros sinsentidos. Por el contrario, puedes hablar con ellos con total coherencia y reflexionar a niveles profundos con total lógica y razón.
NO SIEMPRE ESTÁN COMIENDO
Si tienen hambre comen, si no, no lo hacen, punto. No son máquinas de tragar.
NO SON VICIOSOS HIJOS DE SATÁN
Aunque muchos así lo crean, es falso que todo aquel que tiene un gusto por la marihuana es un drogadicto, vicioso y malviviente que tiene un apego malsano a esta droga. Está bien comprobado que es una de las drogas menos adictivas, y que otras como el cigarro o el alcohol son más potentes y peligrosas, aunque estén mejor vistas.
SIEMPRE ESTÁN PENSANDO
Cuando ves a un marihuano callado, no es que esté en la lela. Al contrario, generalmente está meditabundo, sumido probablemente en reflexiones profundas y, si le sacas conversación, tendrá algo interesante qué compartirte.
NO SÓLO SE JUNTAN CON PACHECOS
Suelen ser muy sociables y su círculo de amistades es muy amplio. No los catalogues como que solamente se juntan en el club del porro y ya.