Cuando alguien te gusta no lo puedes ocultar al mundo, y mucho menos te lo puedes ocultar a ti misma, pues sería como negar tu propia existencia.
Qué emocionante es darte cuenta que alguien te gusta, ¿a poco no? Digo, claro, también está la incertidumbre de saber si a esa persona nosotros le gustamos, y esa incertidumbre de a poco nos mata si no hacemos algo, pero enamorarse es muy bonito de todos modos.
Estas son algunas formas extrañas de darte cuenta que alguien te gusta:
NO LO PUEDES VER A LOS OJOS
Hay algo en su mirada que te intimida, es bastante poderosa para ti. Simplemente no se la puedes sostener. Además, tampoco quieres que él te mire a profundidad, no sea que se dé cuenta de tus imperfecciones.
TE PONES NERVIOSA Y ES NOTORIO
No puedes ocultar que eres un manojo de nervios cuando estás cerca de él, tanto que tus manos te sudan y hasta tu voz tiembla un poco al saludarlo. Él se da cuenta, por supuesto.
NO PONES ATENCIÓN A LO QUE DICE PORQUE SÓLO TE IMAGINAS BESÁNDOLO
Mientras te habla, lo único en lo que puedes pensar es en estar entre sus brazos, acariciándolo y dándole unos sabrosos besos a la luz de la luna.
CUIDAS NO COMER MUCHO
Te comienzas a preocupar por tu figura de maneras en las que antes no lo hacías. Hasta empiezas a pensar en hacer una dieta para adelgazar.
MENCIONAS CUALQUIER PRETEXTO PARA UNA SEGUNDA CITA
Cuando están a punto de despedirse, inventas cualquier cosa para que se vuelvan a ver, no vaya a ser que esa sea la última y se te escape.
STALKEAS TU FACEBOOK A DIARIO
Cuando no lo ves, no puedes resistir la tentación de ver sus fotografías, para no extrañarlo, claro. Y es que no tenerlo cerca se va convirtiendo poco a poco y cada día en una pequeña agonía que termina por impacientarte y querer estar con él tan pronto como sea posible.
CUANDO VA AL BAÑO, MENSAJEAS A TODOS QUE ESTÁS CON ÉL
Estás con él en su primera cita, se levanta al baño y te aprovechas para mandar un mensaje al grupo de WhatsApp que tienes con tus amigas más íntimas: “¡lo logré, chicas! ¡Salí con él! ¡Wuuuu!”